Desactivan un artefacto explosivo del ejército norteamericano en la playa de Burriana de Nerja
Segundo caso en lo que va de año en la provincia del hallazgo de un artefacto explosivo perteneciente al Ejército de los Estados Unidos en una playa. Tras el caso ocurrido el pasado marzo en Benalmádena, este lunes se ha localizado una segunda bengala militar en la nerjeña playa de Burriana. Tres efectivos de la Unidad de Buceo de la Armada Española, desplazados desde Cádiz, han sido los encargados de realizar una detonación controlada, sin que se hayan registrado daños personales ni materiales.
Las alarmas han saltado a primera hora de la mañana, cuando dos pescadores de la zona, Francisco Pastor y José Cabello, han llamado a la Policía Local, después de que el segundo de ellos el pasado viernes sacara del agua el artefacto y lo dejara en la arena. «Pensé que era un extintor de un barco o algo así, lo dejé para que se lo llevaron los servicios de limpieza, pero en todo el fin de semana ha seguido en la arena, y ha habido incluso niños jugando con él», ha confesado a SUR mientras los militares realizaban las labores de desactivación del explosivo, compuesto de fósforo, un material altamente inflamable.
Eugenio Cabezas
Este tipo de bengalas se usan en la navegación marítima para las operaciones de buques militares o incluso mercantes, en caso de emergencia, ya que la llama permanece activa incluso en contacto con el agua. Son fabricados por el Ejército de Estados Unidos, por lo que en su exterior puede leerse US Navy. «Han sido dos extranjeros que vienen a bañarse todas las mañanas a la playa los que nos han dicho que llamásemos a la Policía porque ponía 'peligro', 'no tocar', aún así lo hemos cogido y lo hemos puesto entre una piedras en el paseo marítimo», ha admitido Cabello.
La Guardia Civil ha acordonado la zona y ha dado aviso a la Armada, ya que este tipo de artefactos, cuando aparecen en las playas, son de su competencia. La desactivación ha precisado de hasta tres detonaciones controladas. La última, la más fuerte, ha sido la que ha provocado la combustión completa del material, generando una gran columna de humo y un pequeño fuego, que ha tardado más de media hora en apagarse. Sobre las 17.00 horas, más de dos horas después de comenzar con las maniobras, los militares han dado por finalizada la operación, llevándose los restos en una cápsula de acero.
Uno de ellos ha explicado a SUR que este tipo de artefactos tienen que hundirse en el fondo del mar tras su uso, aunque a veces no lo hacen o salen a la orilla por las corrientes marítimas. «Cada mes tenemos algún aviso parecido en el litoral español», ha apuntado este militar. El suceso ha generado un gran revuelo en la nerjeña playa de Burriana, que a pesar del día desapacible, nublado y frío, ha congregado a decenas de curiosos. Además de la Guardia Civil una ambulancia del centro de salud local ha acudido para actuar por si hubiera sido necesario.
El cordón policial ha sido de unos cien metros alrededor del lugar en el que los militares especialistas han colocado el artefacto para las tres explosiones controladas, delante de una roca de grandes dimensiones, conocida en el pueblo como la 'Piedra de Sanjuanear'. El chiringuito Moreno, el más cercano al punto del hallazgo y de las maniobras, ha trabajado con normalidad, aunque sus clientes no han quitado ojo a lo que estaba ocurriendo, un suceso que se ha convertido en el tema de conversación en Nerja este lunes, circulando decenas de vídeos y mensajes por las redes sociales.