Ingenieros del MIT crean una camisa inteligente con sensores e Inteligencia Artificial
La tecnología está invadiendo muchos de los elementos que mucha gente utiliza en el día a día, tanto en el ámbito laboral como en el de la vida personal, y esto está ayudando a hacer la vida de las personas un poco más fácil en el día a día.
A día de hoy, puedes encontrar tecnología incluso en la ropa, ya que hay muchas zapatillas inteligentes que son capaces de monitorizar la actividad deportiva de quien las lleve puestas.
Ahora, tras un año de investigación, el MIT, Massachusetts Institute of Technology, ha conseguido crear una fibra inteligente programable que es capaz de detectar, almacenar y analizar la actividad del cuerpo humano.
Se ha conseguido crear la fibra mediante la colocación de chips de silicio en un tejido delgado y flexible, que se puede enhebrar, coser e incluso lavar algunas veces —sin pasar de 10— sin miedo a romper esta tecnología. Esta fibra incluye inteligencia artificial en su red neuronal de 1650 conexiones que permiten detectar todo tipo de movimientos y recopilar más información sobre el cuerpo humano.
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— PFCreations Sun Jul 25 22:05:56 +0000 2021
Otra de las ventajas que tiene es que esta es imperceptible. "Cuando se introduce esta tecnología en una camisa, no se nota en absoluto. No sabrías que está allí", afirma Gabriel Loke, uno de los autores del proyecto.
Se trata de una tecnología muy interesante, que puede llegar a almacenar información durante alrededor de 2 meses en la propia fibra de la camisa, lo cual ofrece muchísimas posibilidades. Podrías incluso llevar música almacenada en la ropa. Aunque tienes que tener en cuenta que sin altavoces, esta no se podría reproducir. Esta, tiene muchos usos potenciales, como realizar un seguimiento de la actividad física, descubrir patrones ocultos de tu cuerpo, o incluso la detección de enfermedades.
Además, una de sus ventajas es que es programable, por lo que los usos que se le puede dar pueden ir cambiando a medida que se vaya desarrollando más esta, y buena prueba de ello es que esta investigación ha sido apoyada por organismos como el Instituto de Nanotecnologías de Soldados del Ejército de los Estados Unidos, la Fundación Nacional de Ciencias, la Oficina de Investigación del Ejército de los Estados Unidos, la Subvención Sea del MIT y la Agencia de Reducción de Amenazas de Defensa, según la propia página del MIT